La teleconsulta es una forma de atención del área de la salud a distancia que utiliza las tecnologías de la información y telecomunicaciones para conectar a un paciente con uno o más miembros del equipo de salud que se encuentran en lugares diferentes al del paciente y que pueden interactuar entre ellos. Esta modalidad puede ser útil para consultas clínicas de baja complejidad y/o riesgo de complicaciones, cuando no hay especialistas disponibles en el lugar donde vive el paciente, cuando hay una situación de emergencia sanitaria que impide la atención presencial, o bien, cuando el paciente presenta movilidad reducida o por simple voluntad tiene como preferencia la atención remota.

Sin embargo, la teleconsulta también tiene algunas limitaciones y riesgos que debe conocer antes de aceptarla:

• No sustituye la atención presencial, ya que no permite realizar un examen físico ni otros procedimientos que requieren contacto directo con el paciente.
• Puede sufrir interrupciones o fallas por problemas técnicos o de conexión a internet.
• Si no se protegen adecuadamente los datos del paciente, puede haber una violación de la confidencialidad o la integridad de la información.
• Al no poder hacer un examen físico, el diagnóstico y el tratamiento pueden ser menos precisos o incompletos, y puede ser necesario derivar al paciente a una consulta presencial.
• Bajo una situación de emergencia, riesgo de muerte, necesidad de atención inmediata, enfermedad que puede conllevar riesgo de muerte o lesión de órgano, situación de dolor intenso, el/la paciente debe dirigirse inmediatamente a un servicio de urgencias de manera presencial.

Al aceptar la teleconsulta, usted declara que:

1. Está de acuerdo en compartir su información por medios tecnológicos con el profesional que la recibirá y la utilizará para su atención.
2. Es consciente de que, aunque se tomarán todas las medidas posibles para garantizar la seguridad de su información, existe un riesgo de que se vea comprometida su privacidad o confidencialidad.
3. Se compromete a estar en un lugar donde se respete su privacidad durante toda la teleconsulta y a no grabar ni difundir el contenido de ésta sin autorización.
4. Entiende que la teleconsulta no reemplaza la atención presencial y que puede ser insuficiente o inadecuada para su caso particular.
5. Entiende que la comunicación puede verse afectada por fallas de tipo tecnológicas, independientes de la voluntad del profesional de la salud.
6. Está de acuerdo en que se grabe todo o parte de la teleconsulta, siempre y cuando se informe de manera adecuada y a tiempo por el profesional, se respete la seguridad y confidencialidad de los datos personales y clínicos. Sin embargo, el consultante debe tener presente que en situaciones excepcionales podría haber una vulneración de esta privacidad.
7. Consiento que los diagnósticos que se puedan emitir están efectuados sobre la base de antecedentes incompletos y que por lo mismo, podrían generarse errores en su planteamiento.
8. Si durante la consulta el profesional determina que una atención presencial es la forma más adecuada para el/la paciente, éste será derivado al servicio o especialista apropiado para consultar de manera presencial, pudiendo sugerir que se debe asistir acompañado por un adulto responsable. Si se presenta esta situación, el profesional lo contactará vía telefónica al teléfono previamente proporcionado por el/la paciente.
9. Conoce que el médico tratante es el único que puede decidir si la situación de salud amerita una licencia médica.
10. Entiende que si el/la paciente es un menor de 18 años o con necesidades especiales, debe estar acompañado de un adulto responsable, madre, padre y/o con su representante legal durante toda la atención clínica, quien deberá quedar identificado en la ficha clínica.
11. Entiende que los adolescentes sólo podrán prescindir de un acompañante durante una consulta de telemedicina en las áreas de salud sexual y reproductiva, en conformidad a las disposiciones de la Ley N° 20.418 que fija normas sobre información, orientación y prestaciones en materia de regulación de la fertilidad y su reglamento.
12. Consiento que en caso de anular una consulta con menos de 24 horas de anticipación o perder una cita, se cobrará la tarifa completa por la sesión, pero el profesional puede reagendar la cita si lo considera necesario.
13. Comprende que si el /la paciente se conecta tarde, se utilizará el tiempo restante de la sesión programada y se cobrará la tarifa completa. El tiempo máximo de espera será de 10 minutos.
14. Si el/la paciente espera 10 minutos desde que comenzó la cita y el profesional no se presenta y nadie de Maxisalud lo contactó, puede exigir la devolución total del dinero o reagendar la cita.
15. Al comienzo de la teleconsulta el profesional de la salud preguntará si el/la paciente está conforme o no con los términos de este protocolo de consentimiento, lo cual quedará registrado.
16. Conoce que en cualquier momento durante la teleconsulta puede cambiar de opinión y revocar su preferencia por la atención remota, optando por una atención presencial. Para ello, el profesional le pedirá que lo exprese claramente y también quedará registro de ello, terminando así la teleconsulta. Si esto ocurre el valor de la consulta no será devuelto.
17. Si los medios tecnológicos lo permiten y si está conforme con los términos de este consentimiento, proceda a aceptarlo y enviarlo al profesional de la salud por vía remota. En los casos en donde no sea posible, el profesional que la/lo atienda deberá registrarlo en el registro clínico.